La importancia del fitness
Ejercitarse es muy importante para la salud, pero también es vital hacerlo de la forma indicada. Conoce por qué es tan bueno entrenar.
Lo primero que debes tener claro es que el ejercicio físico es clave para la vida diaria. Cualquier persona que se ejercite, ya sea practicando un deporte, corriendo o asistiendo a un edificio deportivo, estará mejorando su calidad de vida. No solamente para ver cambios en su cuerpo, sino también para tener un estilo de vida más saludable.
Sin embargo, también puedes tener la oportunidad de dar un paso más allá. Básicamente, conseguir más y mejores resultados con la ayuda de un entrenador personal que supervise todos tus movimientos y te oriente mejor.
Esta persona, conocida como coach, es un personal cualificado de la actividad física. Él sabrá indicarte cuáles son las rutinas que deberías hacer para cumplir tus objetivos, además de las recomendaciones sobre ejercicios específicos y el uso correcto de las máquinas.
Los beneficios de un buen coach
La elección de un entrenador personal puede significar el éxito o el fracaso de un entrenamiento. Descubre por qué te conviene elegir uno adecuado a tus necesidades.
¿Por qué elegir un buen coach?
Trabajar con un entrenador personal permitirá que tengas un seguimiento personalizado en cada uno de tus ejercicios físicos. Por ejemplo, hará un progreso al momento de que empieces a levantar pesas en el gimnasio, diciéndote cuánto peso ponerle a la barra o cuáles son los movimientos indicados para notar un progreso.

¿Qué beneficios tiene trabajar con un entrenador personal?
En este sentido, existen varios beneficios de hacer ejercicio con la supervisión de un profesional. Los principales son:
- Menor riesgo de lesiones. Cuando los novatos empiezan a entrenar, suelen hacer ejercicios sin prestarle atención a las recomendaciones sobre las posiciones del cuerpo o el uso de los equipos. Por ejemplo, un entrenador personal te enseñará a levantar peso con barras sin necesidad de que te lastimes tu espalda o acabes con un calambre.
- Aumento de eficacia. No hay rutinas universales, ya que no existen dos cuerpos iguales. Cada uno tiene un físico diferente, pero también los objetivos pueden ser distintos. Lo recomendable es que le indiques tus objetivos a tu entrenador personal, para que no pierdas el tiempo en rutinas que no se adapten a los logros que buscas.
- Motivación. Todos, en algún u otro momento, tenemos ganas de abandonar el cuidado de nuestro cuerpo. Si tienes a alguien que esté pendiente de tus resultados, estarás motivado para hacer aquello que creías imposible y superarte constantemente.
